Declara el Doctor Hernández de la Torre
Es incomprensible el rechazo al diálogo de los invasores de la Rectoría, dice, y manifiesta su temor de que desaparezca la documentación de alumnos.
"Es muy preocupante lo que pasa en la Universidad"
Declaró ayer a DIARIO DEL PACÍFICO el Rector, Lic. Rubén Hernández de la Torre, al comentar a este reportero la amenaza de los jóvenes Manuel García Cayeros y José Ceballos, "quienes sin ser estudiantes de la Universidad, -dijo- encabezaron un mitin ayer al mediodía (el viernes), y frente a palacio de gobierno anunciaron quemar o desaparecer la documentación de los estudiantes inscritos en caso de no resolver las peticiones de quienes mantienen ocupado el edificio de la Rectoría".
El Lic. Hernández de la Torre hizo referencia a que los elementos mencionados forman parte del grupo que se mantiene en la Rectoría, y, por añadidura, están apoderados del Departamento Escolar, donde se guarda la documentación de todos los alumnos.
Aseveró el Rector que el está dispuesto a sostener un diálogo, lo más abierto posible, con los invasores del edificio; a esforzarse para que a través de un acuerdo satisfactorio entre las partes en conflicto, los universitarios "podamos trabajar en paz". Y agregó: "Si en sus peticiones los inconformes sostienen la necesidad de las reformas académica y administrativa, las autoridades estamos demostrando que coincidimos con esa inquietud; prueba de ello, el lanzamiento de la convocatoria para los concursos por oposición en la Preparatoria número uno, de donde se seleccionarán a los maestros más capacitados en cada una de las materias".
--Entonces, ¿entre los invasores de la Rectoría hay gentes ajenas a la Universidad?-- se le preguntó.
--Efectivamente -dijo-; un ejemplo es la intervención de los jóvenes que menciono, los líderes del mitin frente a palacio, y quienes no son alumnos de la Universidad, pues se sabe que sólo son egresados de la preparatoria y jamás se han inscrito en otra de nuestras escuelas.
--¿Hasta qué grado afecta a la Universidad la invasión de la Rectoría?
--Se afecta de muchas formas, pero entre los más perjudicados se cuentan los alumnos que este año egresarán de las diferentes preparatorias, muchos de los cuales tienen planeado inscribirse en otras universidades del país, y en las condiciones en que nos encontramos se dificultará entregarles sus documentos en regla y a tiempo, sobre todo si se cumple la amenaza de desaparecer los archivos del Departamento Escolar.
--¿Y qué otra cosa le preocupa?
--Me preocupa la intransigencia para entregar el edificio de la Rectoría, pese a que las autoridades ofrecemos el diálogo abierto. Entonces ¿qué pretenden? Y me entra el temor por el hecho de que estamos en la mejor disposición de satisfacer exigencias de los inconformes y ellos no acceden en nada, como si tuvieran la consigna de que todo no encontrará pronta solución. Eso es lo incomprensible y preocupante.
El Rector de la UAN también comentó que en su primer intento de convencer a los invasores -cuando el viernes a las 9 horas se presentó personalmente a la Rectoría, en compañía de directores de escuelas y padres de familia de la Prepa Uno- se percató de que el edificio sede de la autoridad universitaria presentaba algunos orificios de bala, pero ignora cómo y cuándo se produjeron.